Aprueban Más Protección a Bancos Contra sus Clientes
PAN, PRI y PRD manejados por Hacienda, Banco de México y los supuestos protectores de usuarios de los servicios de crédito, se hicieron Fuenteovejuna para proteger a los bancos de la posibilidad de que los ciudadanos encuentren alguna defensa en las leyes contra la voracidad de los usureros institucionalizados.
Con el pretexto público de evitar que la banca siga aumentando sin pudor los intereses que carga a sus clientes, el Senado manejó una supuesta iniciativa con que su líder (y cabeza del PRI) Manlio Fabio Beltrones quiso jugar al "adalid ciudadano" y espantó a los banqueros con imponer un tope a su usura imparable.
El cártel bancario, temiendo que en verdad el capo de la famiglia priísta les diera una patada de ahogado, ordenó a sus esbirros que lanzaran una carga contra tal pretensión, que por ilusoria alentó a muchos agobiados con las deudas y las penurias que les causa la política económica neoliberal, impuesta por la tecnocracia salinista ya también enquistada en el PAN.
A favor de los bancos hicieron montón los altos funcionarios de Hacienda, el gobernador del Banco de México, los titulares de las comisiones Bancaria y de Valores, de la Defensa de Usuarios de los Servicios Financieros, el procurador fiscal, los coordinadores parlamentarios del PAN, PRI, PRD, Verde Ecologista y Nueva Alianza.
Por los usuarios sólo estuvieron los coordinadores parlamentarios del PT y Convergencia. Todos los que debieron hablar por el pueblo y defenderlo, estaban del otro lado. Los reguladores justificando a los ¿regulados?
Como Dios ayuda a los malos cuando son más que los buenos, los bancos se salieron --otra vez-- con la suya. Al final, mejoró todo para ellos y empeoró para los ciudadanos. O séase, todo siguió igual. Pero Beltrones, con la acalambrada que les puso a los banqueros, se vistió de lujo, preparando el 2012 para el regreso del PRI a Los Pinos.
Por taparle el ojo al macho, los circunspectos senadores le dieron al Banco de México la facultad (que ya tenía y se ha negado a ejercer) de revisar los problemas que tengan los bancos para "sugerirles"alguna moderación, si es que la junta directiva del BdeM y su presidente lo consideran prudente para evitar el enojo bancario.
Del tope o límite a su usura, ni hablar. Cero. Ahí lo que sea la voluntad del capo del BdeM. Que no tiene mucha para el ciudadano común.
El Banco de México, por nueva disposición del Congreso, tendrá que tomar en cuenta lo difícil que le resulte a los bancos captar dinero en el país, los costos de su intermediación, las cargas fiscales teóricas, sus gastos en el "Boletazo", "Teletón" y demás asistencialismo publicitario (que Hacienda les cubre, pero dizque deben constar en libros), y todo lo que afecte la utilidad para sus accionistas. O sea, debe estudiar bastante bien la posibilidad del cobro bancario, para decidir si es correcta la usura aplicada o debe aumentarse.
No hubo una sola línea (y así lo señaló Ricardo Monreal en nombre del PT y el senador Lobato de Convergencia) para que el BdeM valore la actividad económica del país (de deprimida a empeorada), la inflación real (no la teórica que siempre queda rebasada por la realidad), el índice de desempleo (siempre creciente), las alzas de precios generales (la Canasta Básica ya es otra ficción como el Salario Mínimo), el costo de vida (cada vez más alto) y cualquier otro factor que afecta la realidad cotidiana del ingreso personal de la población y, por tanto, su capacidad de pago.
Para los bancos todo, para la población nada. Como siempre. Precios y cobros de primer mundo en una economía de quinta que se enfila a la décima.
¿Y así pretenden que se vote por quienes siguen arruinando al país?
De verdad confían demasiado en el fraude preparado.
Con información de Blogotitlán
PAN, PRI y PRD manejados por Hacienda, Banco de México y los supuestos protectores de usuarios de los servicios de crédito, se hicieron Fuenteovejuna para proteger a los bancos de la posibilidad de que los ciudadanos encuentren alguna defensa en las leyes contra la voracidad de los usureros institucionalizados.
Con el pretexto público de evitar que la banca siga aumentando sin pudor los intereses que carga a sus clientes, el Senado manejó una supuesta iniciativa con que su líder (y cabeza del PRI) Manlio Fabio Beltrones quiso jugar al "adalid ciudadano" y espantó a los banqueros con imponer un tope a su usura imparable.
El cártel bancario, temiendo que en verdad el capo de la famiglia priísta les diera una patada de ahogado, ordenó a sus esbirros que lanzaran una carga contra tal pretensión, que por ilusoria alentó a muchos agobiados con las deudas y las penurias que les causa la política económica neoliberal, impuesta por la tecnocracia salinista ya también enquistada en el PAN.
A favor de los bancos hicieron montón los altos funcionarios de Hacienda, el gobernador del Banco de México, los titulares de las comisiones Bancaria y de Valores, de la Defensa de Usuarios de los Servicios Financieros, el procurador fiscal, los coordinadores parlamentarios del PAN, PRI, PRD, Verde Ecologista y Nueva Alianza.
Por los usuarios sólo estuvieron los coordinadores parlamentarios del PT y Convergencia. Todos los que debieron hablar por el pueblo y defenderlo, estaban del otro lado. Los reguladores justificando a los ¿regulados?
Como Dios ayuda a los malos cuando son más que los buenos, los bancos se salieron --otra vez-- con la suya. Al final, mejoró todo para ellos y empeoró para los ciudadanos. O séase, todo siguió igual. Pero Beltrones, con la acalambrada que les puso a los banqueros, se vistió de lujo, preparando el 2012 para el regreso del PRI a Los Pinos.
Por taparle el ojo al macho, los circunspectos senadores le dieron al Banco de México la facultad (que ya tenía y se ha negado a ejercer) de revisar los problemas que tengan los bancos para "sugerirles"alguna moderación, si es que la junta directiva del BdeM y su presidente lo consideran prudente para evitar el enojo bancario.
Del tope o límite a su usura, ni hablar. Cero. Ahí lo que sea la voluntad del capo del BdeM. Que no tiene mucha para el ciudadano común.
El Banco de México, por nueva disposición del Congreso, tendrá que tomar en cuenta lo difícil que le resulte a los bancos captar dinero en el país, los costos de su intermediación, las cargas fiscales teóricas, sus gastos en el "Boletazo", "Teletón" y demás asistencialismo publicitario (que Hacienda les cubre, pero dizque deben constar en libros), y todo lo que afecte la utilidad para sus accionistas. O sea, debe estudiar bastante bien la posibilidad del cobro bancario, para decidir si es correcta la usura aplicada o debe aumentarse.
No hubo una sola línea (y así lo señaló Ricardo Monreal en nombre del PT y el senador Lobato de Convergencia) para que el BdeM valore la actividad económica del país (de deprimida a empeorada), la inflación real (no la teórica que siempre queda rebasada por la realidad), el índice de desempleo (siempre creciente), las alzas de precios generales (la Canasta Básica ya es otra ficción como el Salario Mínimo), el costo de vida (cada vez más alto) y cualquier otro factor que afecta la realidad cotidiana del ingreso personal de la población y, por tanto, su capacidad de pago.
Para los bancos todo, para la población nada. Como siempre. Precios y cobros de primer mundo en una economía de quinta que se enfila a la décima.
¿Y así pretenden que se vote por quienes siguen arruinando al país?
De verdad confían demasiado en el fraude preparado.
Con información de Blogotitlán