Prepara Gobierno informe para EU
Recaban información en barrios aledaños a casas de víctimas de contagio en el DF
Hugo Corzo/Grupo Reforma
Ciudad de México. Lunes 27 abril de 2009
Personal de la Unidad de Inteligencia para Emergencias de Salud (UIES) del Gobierno federal prepara una detallada base de datos sobre los casos de influenza porcina en México, y con la cual el Gobierno de Estados Unidos determinará si cierra escuelas o amplía acciones para contener el brote epidemiológico en su territorio.
De acuerdo con médicos norteamericanos que apoyan la contingencia en México, el Presidente estadounidense Barack Obama y sus asesores necesitan saber con precisión cuántos diagnósticos positivos hay por influenza porcina, así como el número de muertes, si fueron hospitalizados o no y desde cuándo.
Requieren, además, saber cuál es la situación que guarda el vecindario aledaño a los domicilios de los hospitalizados y de las personas que murieron víctimas del virus.
Durante una charla entre el director general adjunto de Epidemiología de la UIES, Hugo Lopez-Gatell Ramírez -funcionario de la Secretaría de Salud federal-, una doctora argentina y uno de los coordinadores del equipo norteamericano, consideraron primordial enviar esta información antes del lunes por la noche, para que Washington evalúe el cierre o no de escuelas.
"Están reuniendo información para una base de datos. Hay 25 casos plenamente confirmados. Van a hospitales y viviendas para saber cuántos son personal médico", señaló en un diálogo telefónico en inglés uno de los galenos norteamericanos.
Durante la reunión a puerta cerrada, Lopez-Gatell Ramírez ofreció preguntar personalmente a los titulares de todas las unidades médicas que han recibido pacientes sintomáticos sobre el diagnóstico, edad y estatus del cuadro clínico de cada uno de ellos.
"Vamos a ser muy claros. Haré una ronda de confirmación con los líderes institucionales. Que me confirmen, nombre por nombre, quién es, edad, diagnóstico, y si murió o no", prometió Lopez-Gatell Ramírez a los médicos estadounidenses.
Encuestas en delegaciones
El equipo mexicano y los epidemiólogos extranjeros diseñaron algunas herramientas para recopilar la información de la base de datos, y elaboraron las preguntas y la metodología de las entrevistas para hacer el levantamiento tanto en hospitales como en casas.
En una matriz de doble ingesta de datos se determinó consignar, entre otros datos, las categorías "muerte y hospitalizado" y "recuperación y hospitalizado".
Adicionalmente destacan la necesidad de averiguar, lo más pronto posible, las actividades en los cinco días previos de todas las personas con sintomatología y/o diagnóstico de influenza porcina.
En cada delegación del Distrito Federal, un equipo de expertos de la UIES dirigirá a personal del sistema de salud local para peinar los hospitales y las zonas de vivienda adyacentes a éstos y a los domicilios de las personas presuntamente infectadas, así como de quienes se haya confirmado su muerte a causa de la influenza.
Además de capacitación para saber hacer la "captura de caso", los equipos de trabajo fueron dotados de los cuestionarios, tapabocas especiales y guantes de látex.
Fuente : Grupo Reforma
Recaban información en barrios aledaños a casas de víctimas de contagio en el DF
Hugo Corzo/Grupo Reforma
Ciudad de México. Lunes 27 abril de 2009
Personal de la Unidad de Inteligencia para Emergencias de Salud (UIES) del Gobierno federal prepara una detallada base de datos sobre los casos de influenza porcina en México, y con la cual el Gobierno de Estados Unidos determinará si cierra escuelas o amplía acciones para contener el brote epidemiológico en su territorio.
De acuerdo con médicos norteamericanos que apoyan la contingencia en México, el Presidente estadounidense Barack Obama y sus asesores necesitan saber con precisión cuántos diagnósticos positivos hay por influenza porcina, así como el número de muertes, si fueron hospitalizados o no y desde cuándo.
Requieren, además, saber cuál es la situación que guarda el vecindario aledaño a los domicilios de los hospitalizados y de las personas que murieron víctimas del virus.
Durante una charla entre el director general adjunto de Epidemiología de la UIES, Hugo Lopez-Gatell Ramírez -funcionario de la Secretaría de Salud federal-, una doctora argentina y uno de los coordinadores del equipo norteamericano, consideraron primordial enviar esta información antes del lunes por la noche, para que Washington evalúe el cierre o no de escuelas.
"Están reuniendo información para una base de datos. Hay 25 casos plenamente confirmados. Van a hospitales y viviendas para saber cuántos son personal médico", señaló en un diálogo telefónico en inglés uno de los galenos norteamericanos.
Durante la reunión a puerta cerrada, Lopez-Gatell Ramírez ofreció preguntar personalmente a los titulares de todas las unidades médicas que han recibido pacientes sintomáticos sobre el diagnóstico, edad y estatus del cuadro clínico de cada uno de ellos.
"Vamos a ser muy claros. Haré una ronda de confirmación con los líderes institucionales. Que me confirmen, nombre por nombre, quién es, edad, diagnóstico, y si murió o no", prometió Lopez-Gatell Ramírez a los médicos estadounidenses.
Encuestas en delegaciones
El equipo mexicano y los epidemiólogos extranjeros diseñaron algunas herramientas para recopilar la información de la base de datos, y elaboraron las preguntas y la metodología de las entrevistas para hacer el levantamiento tanto en hospitales como en casas.
En una matriz de doble ingesta de datos se determinó consignar, entre otros datos, las categorías "muerte y hospitalizado" y "recuperación y hospitalizado".
Adicionalmente destacan la necesidad de averiguar, lo más pronto posible, las actividades en los cinco días previos de todas las personas con sintomatología y/o diagnóstico de influenza porcina.
En cada delegación del Distrito Federal, un equipo de expertos de la UIES dirigirá a personal del sistema de salud local para peinar los hospitales y las zonas de vivienda adyacentes a éstos y a los domicilios de las personas presuntamente infectadas, así como de quienes se haya confirmado su muerte a causa de la influenza.
Además de capacitación para saber hacer la "captura de caso", los equipos de trabajo fueron dotados de los cuestionarios, tapabocas especiales y guantes de látex.
Fuente : Grupo Reforma
