Carstens en la lomita de las responsabilidades
La historia en breve
Ciro Gómez Leyva
Martes 10 de marzo de 2009
Maricarmen Cortés, periodista especializada en negocios y finanzas, me dijo ayer que el abucheo a Agustín Carstens le hace pensar seriamente que el secretario de Hacienda vive fuera de la realidad.
Porque se requiere tener una autoestima muy alta para ponerse la gorra y la franela de beisbolista, saltar al diamante del Foro Sol ante 25 mil espectadores y hacer el primer lanzamiento del partido de la selección mexicana. Pero si esa persona es el secretario de Hacienda y el dólar ronda los 16 pesos, la inflación trae de muy mal humor a los ciudadanos y los críticos lo corresponsabilizan de estar beneficiando a especuladores, pues se necesita ser suicida, o no tener pálida idea de cómo andan las cosas.
Pregunté en Los Pinos si la imagen de Carstens perfilando el wind-up estilo Valenzuela era parte de una estrategia. Recibí por respuesta un escueto: “Nos enteramos en las noticias”.
Miguel de la Madrid tenía, ni modo, que inaugurar el Mundial de Futbol de 1986 en medio de la parte más sañuda de la cruel crisis de los 80. Me tocó estar en el Azteca ese mediodía: aun en mi rabia de ciudadano despellejado sentí pena por el Presidente. ¿Pero a Carstens, quién lo mandó a la lomita de las responsabilidades? ¿Quién es su manager?
Quien sea, lo envió al matadero: su biografía ha quedado marcada indeleblemente por el abucheo del domingo en el Foro Sol. Lástima, porque se trata de un amante de la pelota.
Abucheo que es también para el gobierno de Felipe Calderón, que cometió el doble error de no controlar a sus jugadores, ni advertirles que casi todo se vale en la política, menos exponerse sin ton ni son al escarnio del respetable.
Ojalá después del error no venga un hit.
Fuente : Milenio
La historia en breve
Ciro Gómez Leyva
Martes 10 de marzo de 2009
Maricarmen Cortés, periodista especializada en negocios y finanzas, me dijo ayer que el abucheo a Agustín Carstens le hace pensar seriamente que el secretario de Hacienda vive fuera de la realidad.
Porque se requiere tener una autoestima muy alta para ponerse la gorra y la franela de beisbolista, saltar al diamante del Foro Sol ante 25 mil espectadores y hacer el primer lanzamiento del partido de la selección mexicana. Pero si esa persona es el secretario de Hacienda y el dólar ronda los 16 pesos, la inflación trae de muy mal humor a los ciudadanos y los críticos lo corresponsabilizan de estar beneficiando a especuladores, pues se necesita ser suicida, o no tener pálida idea de cómo andan las cosas.
Pregunté en Los Pinos si la imagen de Carstens perfilando el wind-up estilo Valenzuela era parte de una estrategia. Recibí por respuesta un escueto: “Nos enteramos en las noticias”.
Miguel de la Madrid tenía, ni modo, que inaugurar el Mundial de Futbol de 1986 en medio de la parte más sañuda de la cruel crisis de los 80. Me tocó estar en el Azteca ese mediodía: aun en mi rabia de ciudadano despellejado sentí pena por el Presidente. ¿Pero a Carstens, quién lo mandó a la lomita de las responsabilidades? ¿Quién es su manager?
Quien sea, lo envió al matadero: su biografía ha quedado marcada indeleblemente por el abucheo del domingo en el Foro Sol. Lástima, porque se trata de un amante de la pelota.
Abucheo que es también para el gobierno de Felipe Calderón, que cometió el doble error de no controlar a sus jugadores, ni advertirles que casi todo se vale en la política, menos exponerse sin ton ni son al escarnio del respetable.
Ojalá después del error no venga un hit.
Fuente : Milenio
